Me llaman mojado... pero mi corazón está seco,
seco de las desgracias de mi tierra,
muerto por el hambre,
la desnudez,
la violencia... ¿violencia?
pero sin esta violencia, no vivo, no como, ni duermo...
Mi país...
Si hubiese tenido la "oportunidad",
este maldito viaje nunca hubiese tenido inicio,
ni hubiese visto morir a mis amigos en el cruce del rio,
anegados por toneladas de agua;
o ser fulminados en el cruento desierto,
heridos los labios por el infernal sol,
la arena, el calor...
¡Que descansen en paz!...
Y de verdad en paz, porque duermen,
ya, sin dolor; sin pena, sin tener que pelear por cruzar la ¡maldita frontera!
la que divide las naciones, y nos divide tambien como humanos, hermanos;
¿Por qué fronteras, si las tierras son de todos?
Todos estamos en este planeta, en esta esfera verde azul,
que es el legado de Dios para la humanidad,
pero la envidia, las leyes del hombre, las tenencias, el poder;
hacen de este viaje, el tan nombrado "Sueño americano",
que de sueño, solo en nombre queda..
Y cuando llegue, si es que llego, trabajare duro,
por mi chepito, por la Alicia, por mi mamá...
"Dios me lo bendiga mi hijo..." Fueron sus ultimas palabras,
cuando me desaparecia entre las cumbres de aquella caballita bañada por la luna llena,
porque aun no habia amanecido. Mi madre... ¡Luchare por ustedes!
Solo te pido Dios mio, que si llego, luchare y si no... pues,
cuida a mi familia, en tus manos estoy, y esta mi "sueño"
tengo seco el corazón, pero llenos mis ojos de llorar,
lloro por mi familia, por mis amigos, por mi...
y que si la muerte me alcanza, pues arropame con tu manto.
Me llaman mojado... pero mi corazón está seco.
Dedicado a todos los que día a día, cruzan la frontera en busca del "sueño americano", por los que han muerto, por los hijos de nadie, por mis paisanos, por mis hermanos...
